Hábitos alimenticios que mejoran la salud:
- Desayuno: el desayuno debe ser nutritivo y completo, ya que si se tiene un desayuno sencillo y poco abundante, se tiene la sensación de seguir cansado con problemas para concentrarse y altibajos emocionales. El desayuno debe estar compuesto por proteínas, huevos, lácteos, cereales, frutos secos, frutas y grasas como el aceite de oliva extra virgen.
- Proteína Animal: reduzca el consumo de carnes rojas y sustitúyalas por proteína vegetal, como soja, lentejas y frutos secos.
- Grasas Trans: las grasas y aceites parcialmente hidrogenados (grasas trans), son productos elaborados industrialmente. El consumo continuo de las grasas trans tiene un efecto dañino sobre la salud.
- Carbohidratos: La función principal es suministrarle energía al cuerpo, especialmente al cerebro y al sistema nervioso, pero hay que tener mucho cuidado con el consumo excesivo de los carbohidratos simples o de rápida absorción como el azúcar, harinas blancas, dulces, galletas, mermeladas, entre otros, y consumir más los carbohidratos complejos o de lenta absorción como los cereales integrales, hortalizas, verduras, legumbres entre otros.
- Azúcar: el consumo excesivo de azúcar aumenta el colesterol total y los triglicéridos, interfiere con la absorción de proteínas y minerales, ocasiona una subida rápida de la adrenalina, aumenta la hiperactividad y la dificultad de concentración en los niños.
- Sal: el consumo excesivo de sal aumenta la presión arterial y las enfermedades cardiovasculares. Sazone las comidas con especias y hierbas aromáticas, y escoja los productos que estén elaborados con menos cantidad de sal y sodio.
