Lo primero es tener una buena salud y bienestar para rendir en cualquier trabajo. Un estudio realizado por el Departamento de Sociología en la Universidad de Minnesota, analizó a varios empleados de una empresa que adoptaron horarios flexibles para sus trabajadores, concluyendo que los trabajadores mejoran cuando pueden trabajar en horarios flexibles que en horarios rígidos.
El estudio muestra que cuando los empleados pueden cambiar el lugar de trabajo y tienen horarios flexibles, el tiempo que se pasa en la oficina es mucho más productivo y tienen mejores resultados reales, creando a su vez un ambiente de trabajo que promueve el compañerismo, el bienestar y es más saludable.
Entre las conclusiones tenemos, que los empleados con horarios flexibles tienen mayor control del horario de trabajo, se reducen los conflictos en el trabajo y con la familia, descansan y duermen mejor, tienen mas energías y controlan mejor el estrés.
