Los quesos son bajos en ácidos grasos saturados y ricos en ácido linoleico, son elaborados con leche de vacas lecheras que reciben como suplemento alimenticio lípidos insaturados de origen vegetal y marino, logrando modificar el perfil de los ácidos grasos que forman parte de la grasa de la leche.
Con este proceso disminuimos los ácidos grasos saturado en la leche, que son perjudiciales para la salud, elevando el colesterol.
Esta técnica fue desarrollada en Argentina por la compañía láctea Prodeo, INTA e INTI de Argentina.
